El contenido de la reunión se mantiene bajo un estricto hermetismo, aunque se descuenta que será atravesado por las elecciones de la AFA, mientras la relación entre el Presidente y el conductor televisivo pasa por momentos de tensión. El presidente de Boca Juniors, Daniel Angelici –del riñón más íntimo de Macri, es uno de los principales detractores de Tinelli en la AFA.
Además, varios de los clubes de primera división miran al Gobierno con recelo por la distribución de los millones del programa Fútbol Para Todos (FPT), en el que el macrismo tiene cada vez más injerencia.
Según pudo reconstruir LA NACION, Marín habría sido el encargado de juntar a las partes y negociar para que Macri y Tinelli se vean hoy cara a cara. De confirmarse la candidatura de Tinelli y el aval oficial, sus bastiones en el día a día de la AFA serán el secretario general del comité ejecutivo, Daniel Angelici y el tesorero, Matías Lammens. A ellos podría sumarse Eduardo Spinosa (Banfield) y algún dirigente del interior para orquestar la campaña entre los clubes de las provincias.